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• Nuevo libro editado por la UAA presenta estudio sociocultural del cine en el estado.
• Grupo religioso de Aguascalientes fueron publicistas de películas a principios del siglo XX.

Aguascalientes cuenta con cerca de 10 complejos cinematográficos con más de dos salas, que por lo general están llenos diariamente, lo cual evidencia el alto interés de esta sociedad por el cine, gusto por el que esta ciudad segmentó a su población a principios del siglo XX; señaló Evelia Reyes Díaz al presentar en la Universidad Autónoma de Aguascalientes el libro: “Ciudad, lugares, gente, cine. La apropiación del espectáculo cinematográfico en la ciudad de Aguascalientes, 1897-1993”.

En entrevista, Reyes Díaz comentó que el consumo del cine en Aguascalientes ha sido alto a lo largo de los años, e incluso durante inicios del siglo XX existían cerca de 14 espacios de proyección para una población de, a lo mucho, 30 mil personas. Dichas proyecciones se utilizaban como lugares de exhibición de ciertas clases y grupos, así como de educación moral.

Apuntó que los aguascalentenses de principios de siglo iban al cine, no sólo por diversión, sino que buscaban discursos morales, educativos, y formar parte de una sociedad cosmopolitan al acceder a este tipo de espectáculos innovadores durante la época.

La doctorante externó que a través de este análisis se pudo generar un acercamiento al perfil de la sociedad de Aguascalientes de 1897-1993, la cual presentaba un fuerte moralidad católica, incluso obispos y sacerdotes fungían como publirrelacionistas al promocionar películas como “Rey de reyes”, y su versión femenina “Reina de reinas”.

Aunado a lo descrito, Evelia Reyes explicó que en el estado se arraigó un concepto muy rígido sobre el buen gusto, lo cual derrocaba todos los elementos cinematográficos de alguna producción, “una de las citas que vamos a ver dice: este espectáculo es maravilloso, es muy lindo, pero si no fuera por estas indecencias que se ven…”, señaló la autora del libro.

De esta forma manifestó que en Aguascalientes se prohibieron varias películas, al igual que a nivel nacional durante los años de la revolución, y se presentó en el estado un fenómeno al estilo de “Cinema Paradiso”: se cortaban algunas escenas de las cintas cinematográficas para evitar ciertos discursos visuales.

En la presentación de este libro, realizada en el edificio Polivalente de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, participaron como comentaristas Andrés Reyes Rodríguez, profesor investigador de la UAA, y Eduardo de la Vega Alfaro de la Universidad de Guadalajara.