Universidad Autónoma de Aguascalientes

Carlos Eduardo Romo Bacco: de estudiante a integrante de la H. Junta de Gobierno

gaceta uaa

Su formación como estudiante en la carrera de Ingeniería Agroindustrial del Centro de Ciencias Agropecuarias, además de su participación como consejero alumno propietario y jugador de la selección de voleibol, fueron las primeras actividades de acercamiento del doctor Carlos Eduardo Romo Bacco con la Universidad Autónoma de Aguascalientes; sin imaginar que este año comenzaría un nuevo encargo en el máximo órgano de gobierno de nuestra Casa de Estudios: la Honorable Junta de Gobierno.

Tras estudiar la Maestría en Administración y el Doctorado en Ciencias, Tecnologías Agrícolas, Pecuarias y de los Alimentos, comenzó a trabajar como profesor de asignatura en la UAA en 2005 impartiendo una materia con solo dos alumnos de la carrera de Agronomía; posteriormente participó como profesor de medio tiempo, por lo que se fue involucrando en más actividades del Centro de Ciencias Agropecuarias: en el área de Tecnología de Alimentos, después obtuvo un plaza como técnico académico y llegó a ser secretario académico. En el año 2016 obtuvo un nombramiento de tiempo completo en el Centro de Ciencias Empresariales, donde desarrolló actividades de docencia e investigación y recientemente a cargo de la secretaría académica (2017-2022).

¿Cómo se ha encaminado en el ámbito de la investigación y sus líneas de interés?

Yo vengo del Centro de Ciencias Agropecuarias, donde comencé a trabajar el manejo productivo en el sector agroalimentario, específicamente en el sector pecuario, después cuando ya tuve la oportunidad de proponer proyectos de investigación quise vincular esa parte productiva con el aspecto de la organización y gestión con la intención de fusionar la experiencia que tuve en el centro agropecuario con esta nueva dinámica de los negocios en el sector agroalimentario que abordamos en el Centro de Ciencias Empresariales. Actualmente estamos trabajando con productores en el área de reconversión productiva agrícola; si bien Aguascalientes tiene una vocación muy importante en la producción lechera, el consumo de los alimentos para los animales demanda mucha agua y por otra parte se ha identificado un impulso por parte del gobierno para disminuir el consumo de agua en las parcelas, lo que puede llegar a atraer mayor rentabilidad o nuevas opciones para los productores. Entonces queremos evaluar, desde el punto de vista económico, social y ambiental qué es lo que sucede con esos programas de reconversión a partir de las opiniones de los productores.

¿Cómo podría conjugar su trayectoria universitaria ahora como parte de la Junta de Gobierno?

Creo que ser integrante de la de la Junta de Gobierno es un reto personal que requiere poder balancear la experiencia que tengo como estudiante, como académico, como investigador, en función de la visión y la perspectiva que podamos tener en conjunto todos los integrantes de la Universidad. Considero que son proyectos a largo plazo en los que a nosotros nos corresponde participar en ellos e incidir de manera positiva en bien de la Universidad.

¿Qué significa para usted este nombramiento?

Creo que es una oportunidad de poder dar algo de lo que yo he aprendido aquí en la Universidad, que es ser humano, ser empático con las personas y sobre todo ser muy propositivo. Entonces,  para mí va a ser una experiencia muy enriquecedora; tengo que dar lo mejor de mí. Más que un reto, es una oportunidad para dar algo más, estoy contento por poder participar y haber sido elegido por el Consejo Universitario.

Siempre tuve una idea de mejorar mi participación en la Universidad, siempre he considerado que quiero tomar decisiones importantes y ésta es una de ellas donde puedo llegar a formar parte de proyectos relevantes, espero poder aportar lo mejor que pueda con mi experiencia y con lo que aprenda también de mis compañeros.

Considerando el contexto inicial del 2023 ¿qué mensaje les puede compartir a los estudiantes?

Yo les diría que debemos estar conscientes de que el entorno puede cambiar en cualquier momento, que la Universidad se adaptó de una buena manera a esas situaciones y adversidades ajenas a nosotros que se presentaron, siempre es bueno ser positivos y buscarle lado bueno a las cosas ya que siempre se va a aprender algo. Esta pandemia y el alejamiento físico de las personas, nos trajeron muchas otras opciones para mejorar nuestra práctica docente y para que los estudiantes pudieran mejorar en su aprendizaje con otras técnicas; entonces creo que vale la pena ser propositivos, no conformarnos pero siempre mantener una actitud positiva de que podemos aportar algo.

¿Qué retos considera que tiene la universidad para este año, sobre todo pensando en el contexto social, político y educativo de nuestro país?

Yo creo que hay muchos retos para plantear o replantear nuestras vivencias de hace tres o cuatro años, pues ya no vamos a ser los mismos. Tenemos que ser muy eficientes con los recursos que podamos tener disponibles, no solo económicos sino también los recursos humanos y materiales, sobre todo debemos tener la perspectiva de largo plazo. Creo que la parte de sostenibilidad es muy importante, ya que el agotamiento de los recursos nos llevaría a tener situaciones o adversidades graves para la sociedad. Por lo tanto creo que si somos conscientes de que participamos de un entorno y tenemos que cuidarlo, ese será el principal reto: insertarnos en un ambiente profesional donde no soy yo únicamente, sino los demás y el entorno.