Universidad Autónoma de Aguascalientes

GALLOS CREANDO | Novenario, un poema de Iván Gómez

gaceta uaa

Colaboración: Iván Yahir Gómez Mancilla, Ingeniería en Computación Inteligente, segundo semestre.

Noviembre se fue. Se fue llevándose el azúcar, la naranja y las flores.

Nos dejó la muerte, o menos que eso… nos dejó los muertos.

 

I

El Domingo se fue y con él la Esperanza

y sus martirios y sus tantos sacrificios.

Los rezos y las letanías sacerdotales.

El clavo en la cruz y el pecado.

Perdón y olvido,

condena y penitencia.

El quinto misterio lo recé yo

en mis adentros,

tan adentro que solo tú lo escuchabas,

los otros cuatro

los rezaron tus hijos

y tu Esperanza amada.

II

Me gritaba la Esperanza

me pedía atención.

No podía acabar así el día, tan de mañana.

¿De cuándo acá oscurece cuando me levanto?

¿y las campanadas de la iglesia?

Hoy no bajaron los ángeles a misa.

Hubo silencio.

¿Dónde estás Esperanza?

Tú también te acabaste con Domingo.

Tu cara al cantar alabanzas,

tus ojitos suplicantes.

Ya no quitas vistas del suelo

¡Santa virgen!

¿De cuántas lágrimas está tejido tu manto?

III

Domingo familiar

con una sola alma que te reza.

No te sobra siquiera un padre nuestro.

¡Vaya sarcasmo eres!

tan importante fuiste que al final te dejaron.

La única moneda con que puedes pagar es tu pasado,

en lo demás, eres pobre entre pobres.

Ojalá seas mártir.

Déjame lo que no necesites y vete,

espero encontrarte la próxima semana

en el mismo instante de la vida.

Y si te apresuras y no volvemos a coincidir,

te habrás ido ligero

pero te quedaré a deber un abrazo… un beso.

IV

¿En qué reposa la vida cuando se exhala otoño?

si el tiempo siendo tiempo deja de ser válido

y la última palabra nunca se concluye.

Lleva mucha prisa el segundero,

dejémosle caminar corto, con paso cálido,

que se haga eterno.

Esperemos que vuelva el Domingo,

ya no lloremos.

¡Ay Esperanza!

Te esperaré 7 días y no más,

empezando el lunes.

¡Ay Domingo!

Déjame dormir.

Solo quiero quedarme cinco minutos más.