Universidad Autónoma de Aguascalientes

Tras 36 años de actividad continua mayoritariamente en ámbitos como la corrección de estilo, el diseño de publicaciones institucionales, así como en la edición y la producción editorial, Martha Esparza Ramírez concluyó su trayectoria en la Universidad Autónoma de Aguascalientes en diciembre de 2023; sin embargo, continúa desempeñando diversas funciones en la Red Nacional Altexto y en la Asociación de Editoriales Universitarias de América Latina y el Caribe (EULAC).

En esta entrevista, nos cuenta que su ingreso a la UAA sucedió en 1987 con un medio tiempo en atención al público en el Departamento de Optometría, y después con una convocatoria para el puesto de corrector de estilo del departamento editorial (hoy denominado Procesos Gráficos) se introdujo en el mundo de los libros; después pasó al área de diseño y lleg a fungir como jefa de la sección de diseño. Posteriormente, a partir del 2003 cuando se crea el Departamento Editorial en la entonces dirección general de difusión se desempeñó como jefa de la sección de producción hasta su nombramiento en el año 2009 como responsable del Departamento Editorial. A la par de su actividad laboral en la UAA, estudió la carrera de Asesoría Psicopedagógica, por lo que también nos comparte sobre su desarrollo profesional y amor por esta casa de estudios.

¿Cómo fue tu trayectoria en la Universidad Autónoma de Aguascalientes?

Fue una trayectoria muy bonita. Trabajando en procesos gráficos a la par estudié la licenciatura en asesoría psicopedagógica aquí, me la pasaba todo el día en la Universidad y claro que amaba esta universidad por pasar todo el tiempo aquí, pero además porque me dio la oportunidad de formarme profesionalmente, me dio el sustento para para mantener a mi familia, me dio también la oportunidad de profesionalizarme con las facilidades para estudiar la maestría en edición a distancia; y gracias también a la universidad pude estar en foros como la Red Nacional Altexto, de la cual fui coordinadora de 2017 a 2021, que me impulsó para llegar a ser vicepresidenta de la región septentrional de EULAC. Entonces ha sido como providencial desempeñarme en el área de los libros y las oportunidades se han ido dando, gracias a esa preparación que la UAA me ofreció.

¿Cómo ha sido la evolución del área editorial de la Universidad?

Lo que hemos visto en la Red Nacional Altexto es que la mayoría de las editoriales universitarias pasamos por los mismos procesos, es decir, en las universidades había un área de imprenta a donde llegaban todas las publicaciones y todos los maestros se acercaban para que les hicieran un libro; después pasó a formalizarse en un área editorial como tal. Y en estas áreas editoriales lo que se hace, y lo que se ha tenido que hacer, es organizar todas las publicaciones de universitarias en un gran catálogo con un perfil y un objetivo específico. En el caso de la UAA, su misión es dar a conocer al público toda la ciencia y la cultura que se genera en la institución a través de la investigación y la creación de sus autores, tanto de la comunidad universitaria y de autores del estado y la región, siempre y cuando el libro o el contenido sea de calidad. Esa es la única prerrogativa que se ha pedido. Entonces, la organización en catálogos, el catálogo en colecciones, las colecciones en series, etcétera, todo para darle una identidad al sello editorial.

En eso nos hemos preocupado mucho en la UAA, y hemos caminado a la par las universidades de la Red Nacional Altexto, pero también hemos visto que en América Latina sufrimos de las mismas necesidades de actualización de seguir el caminito de las buenas prácticas para garantizar la calidad de los contenidos y por supuesto, desde hace muchos años, dejamos a un lado esa idea de que los libros de las universidades son libros feos y aburridos. Los libros universitarios tienen todo para competir con cualquier editorial privada. Yo creo que en este tiempo que yo estuve trabajando en la universidad, tuve la oportunidad de crear ese catálogo y de que se creara esa imagen del sello de la Universidad Autónoma de Aguascalientes. Los libreros y los distribuidores, sobre todo los que nos apoyan en las ferias del libro, tienen perfectamente identificado cuáles son los sellos, cuáles son los contenidos, cuál es la tendencia o las temáticas que cada universidad tiene; entonces a nosotros, la verdad que me da mucho gusto que por ejemplo en la FIL Guadalajara nos dijeron que tenemos un sello muy bonito, que tenemos unas colecciones muy bonitas y que además los contenidos están bien cuidados. Eso es una gran satisfacción con la que yo me voy.

 

Los libros universitarios tienen todo para competir con cualquier editorial privada. Yo creo que en este tiempo que yo estuve trabajando en la universidad, tuve la oportunidad de crear ese catálogo y de que se creara esa imagen del sello de la Universidad Autónoma de Aguascalientes.

 

En ese contexto que nos platicas, ¿qué retos tienen aún las universidades?

El reto mayor, y lo hemos discutido en las últimas mesas en las que he participado en las  ferias del libro de Minería, la de Guanajuato y la de Monterrey, es un reto que compartimos también con las editoriales privadas, en relación a la distribución y la colocación de los libros. Lo que estamos haciendo es ofertar el libro en los distintos formatos que existen: el impreso, la impresión bajo demanda, en formato digital y también en sus vertientes de PDF, HTML y eBook, para que el lector escoja el que más le acomode. Anteriormente, hacíamos un tiraje que luego se fue disminuyendo para reducir costos pero el impacto con los libros impresos es igual al número de ejemplares que tienes, y que no se queden en el almacén sino que lleguen efectivamente al público; pero con los libros digitales el abanico de usuarios se abre no nada más a nivel regional, sino a nivel mundial. Hemos visto que hay libros que nos piden de otras latitudes y pues eso también nos da mucho gusto.

De las colecciones de la UAA ¿cuál sería alguna favorita?

Hay varias que son mis favoritas. Por supuesto la colección Letras que reúne poesía, ensayo,  narrativa en general; esa esa me da mucha satisfacción porque le debemos el primer diseño al destacado ilustrador Gustavo Díaz Montañez, después Genaro  siguió con esa línea. Es un diseño austero, elegante, a una tinta, en su mayoría esta colección tiene una ilustración en la portada; y  también me es muy significativa por lo que te decía, porque no sólo reúne a autores de la universidad sino de otros lugares. Hemos visto como un rasgo de calidad que tenemos que cuidar, es que en los catálogos universitarios debe haber un equilibrio entre los autores internos y externos, por aquello de evitar endogamia, es decir, que nada más publiques a los autores de tu comunidad académica. Y esta colección refleja eso: hay muchos autores externos a la universidad que enriquece el catálogo, además es un signo de calidad por el cuidado de los dictámenes; pero sobre todo porque autores de gran renombre confían en el sello de la UAA.

Hay otra colección que me gusta mucho que es la Ciencias de la vida que son los libros a color enfocados a estudios botánicos; para esa colección nos inspiramos en una colección de la CONABIO y nosotros hicimos una adaptación, de tal forma que son libros de pasta dura, pequeños, a color, y la verdad que es esa colección también me gusta mucho. Otra a la que le tengo un especial cariño es a la de Historia. En esta el reto fue lograr establecer una colección que comunicara el sello editorial y convencer a los autores, que pertenecen a las Ciencias Sociales, una de las áreas con mayor producción obviamente por su objeto de estudio, para formar la colección y unificarla mediante un diseño austero y elegante que resalta en su portada la letra H, de historia. La verdad es una colección muy bonita.

Sobre el reconocimiento al Mérito Editorial que entregó la Universidad Autónoma de Nuevo León ¿qué significó para ti?

Este premio sí me dio mucho gusto. Lo sentí con mucho cariño, me lo dieron con mucho cariño y así lo recibí viniendo de una universidad hermana; además es el segundo reconocimiento que le otorgan a alguien de la Red Nacional Altexto, el primero fue a Edgar García, de la Universidad Veracruzana y quien también fue coordinador de la Red Nacional Altexto. Fue una cosa muy bonita, llena de mucho cariño; pero no es nada más un reconocimiento personal sino también un reconocimiento a todo el equipo, a la Universidad Autónoma de Aguascalientes, que es la institución que me dio el respaldo; a la Red Nacional Altexto y mis compañeros que me dieron la confianza de representarlos. Entonces no es un reconocimiento personal, sino un premio colectivo.

Concluiste tu trayectoria en la UAA, pero continuas en Altexto y en EULAC, ¿qué sigue para ti?

Continuar con esos retos de contribuir a que las universidades tengamos visibilidad y que lo hagamos de manera más eficiente y más eficaz. Lo vamos logrando, cada vez más, los compañeros, los editores universitarios, se dan cuenta y perciben con absoluta claridad que es mejor trabajar en equipo, porque es difícil lograr lo que hemos alcanzado en Altexto de manera individual, sobre todo por aquello de los recursos, es mejor reunir recursos, experiencias y capacidades para todos juntos caminar en esta difusión. También hemos estado trabajando en los últimos tiempos en reconocer y tener conciencia ante todos, de que el papel de las universidades en la historia del libro y la creación del libro ha sido fundamental, pues no somos un ente que está inventando ser editores, no. Siempre desde la creación de las universidades, éstas han jugado un papel súper importante en la promoción del libro, en la necesidad y creación del libro como material para transmitir los contenidos.

Finalmente ¿qué te llevas de la Universidad?

Pues mi vida, mi vida, está aquí. Me llevo muchas satisfacciones, la verdad que me voy… Me han preguntado que qué se siente estar jubilada y aún no sé porque sigo trabajando en la transición, en la Red Nacional Altexto y en la Asociación de Editoriales Universitarias de América Latina y el Caribe (EULAC), sigo activa.

 

 

Martha Esparza Ramírez, reconocimiento al Mérito Editorial UANLeer 2024

Durante la inauguración de la edición 2024 de la Feria Universitaria del Libro, UANLeer, la maestra Martha Esparza Ramírez recibió el Reconocimiento al Mérito Editorial de manos del rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Dr.  Med. Santos Guzmán López, por su destacada trayectoria de más de dos décadas en la edición y el diseño universitario, y como muestra de agradecimiento a su labor para el fortalecimiento de la Red Nacional Altexto y la editorial de la Universidad Autónoma de Aguascalientes

Durante su mensaje, con profunda emoción y beneplácito, la maestra Martha Esparza Ramírez destacó que se trata de una distinción colectiva, que va para todos aquellos con cuya “presencia, acompañamiento, confianza y trabajo han estado a lo largo de muchos años al frente de la editorial de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, y trabajando codo a codo con los colegas de la Red Nacional Altexto, siendo así, parafraseando a Benedetti –dijo– mucho más que dos”. Además de destacar la labor de los editores y el impacto de su trabajo, también agradeció el espacio brindado para la Red Nacional Altexto y reconoció la promoción de la lectura y la riquísima producción que emprende la Universidad Autónoma de Nuevo León.

 

“Como editores tenemos una tarea preciosa y privilegiada, pues no sólo somos artífices de productos editoriales, sino que somos promotores de la difusión del conocimiento, el arte, la recreación y la cultura humanas. No sabremos nunca con certeza a cuántas personas les estamos cambiando la vida ofreciendo un parangón para prepararse profesionalmente, para salir de situaciones difíciles, para versarse así mismas mediante la lectura y la asimilación de mundos nuevos, y creando así personas más preparadas para aportar su granito de arena y hacer de este un mundo mejor, más equitativo, más equilibrado y en el que prevalezca el respeto mutuo, la solidaridad y la empatía”.